lunes, 25 de febrero de 2019

VIOLENTA JORNADA ELECTORAL EN NIGERIA



Después de una agitada campaña electoral en que perdieron la vida 233 personas, 72,8 millones de lectores nigerianos concurrieron a las urnas el pasado sábado 23 para elegir a un nuevo presidente

Después de una postergación de siete días por “problemas logísticos”, el sábado 23 de febrero abrieron sus puertas más de 120.000 centros de votación para recibir a 72,8 millones de electores que deberían elegir a un nuevo presidente para Nigeria.

Además, los votantes escogieron a  360 diputados nacionales, 109 senadores a los 36 gobernadores y a los integrantes de las asambleas estaduales.

El fraude electoral es habitual en las elecciones nigerianas. Para contrarrestarlo, la legislación electoral exige que los votantes sean verificados biométricamente antes de sufragar, un cambio importante respecto del pasado cuando con solo llenar un formulario se permitía votar a electores no correctamente identificados. Aunque subsisten las tradiciones prácticas de compras de votos, fraude en el recuento de votos y el desbaratar las elecciones en bastiones de oposición, lo que conduce a frecuentes impugnaciones y estallidos de violencia. A lo largo de la campaña presidencial perdieron la vida 233 personas, 16 de ellas en el día de la votación acompañadas de ataques incendiarios a locales del CENI.

La justicia electoral nigeriana ha inscripto a 73 candidatos presidenciales. Aunque la legislación vigente favorece a los dos grandes partidos: el oficialista All Progressives Congress y el opositor Partido Democrático del Pueblo, porque exige al vencedor que obtenga al menos un 25% de los votos, en 24 de los 36 estados.

Entre los candidatos solo dos postulantes tiene posibilidades, ambos son septuagenarios musulmanes nacidos en el Norte del país. El favorito es el actual presidente general Muhammadu Buhari, de 76, años, candidato por el partido Congreso de Todos los Progresistas, y el opositor, abogado, empresario y político Atiku Abubakar, de 72 años, del histórico Partido Democrático Popular, el principal retador.

El periodista español José Naranjo, un experto en política africana, ha sentenciado sobre las elecciones nigerianas: “Buhari tiene el poder, pero Abubakar tiene el dinero.”

El presidente Muhammadu Buhari, nació en Katsina, el 17 de diciembre de 1942 fue el séptimo presidente de Nigeria y el primero del régimen militar que siguió a la llamada “Segunda República” de este país. Ocupó el cargo desde el 31 de diciembre de 1983, año en que se produjo el golpe de Estado, hasta el 27 de agosto de 1985, cuando otro golpe militar lo reemplazó por el también general Ibrahim Babangida.

Intentó retornar a la presidencia infructuosamente en las elecciones presidenciales de 2003, 2007 y 2011.

Finalmente, en las elecciones celebradas el 28 de marzo de 2015, obtuvo la mayoría absoluta al conseguir el 53,23% de los votos y se convirtió en presidente del país, sucediendo a Goodluck Jonathan. Su triunfo en la elección estableció el precedente, inédito en la historia nigeriana, de que un opositor derrotó a un presidente en funciones. Asumió el cargo el 29 de mayo de 2015.

Actualmente, existen sería dudas sobre el estado de salud de Buhari, al punto tal que el presidente debió presentarse en la televisión para aclarar que no era un “clon” de si mismo. Su frase “Soy el verdadero yo, se los aseguro”, se hizo inmediatamente viral provocando risas y burlas. Esa fue su espontánea respuesta a la versión de que había sido reemplazado por un doble sudanés llamado Jubril.

Lo cierto es que Buhari, en sus cuatro años de gobierno realizó más de diez viajes al Reino Unido para recibir tratamiento médico para una enfermedad nunca identificada oficialmente. Su enfermedad lo obligó a pasar 170 días en Londres con licencia médica oficial desde que asumió la presidencia en 2015.

Nadie sabe cuánto tiempo su salud le permitirá seguir gobernando si elegido para un nuevo mandato de cuatro años que concluirá cuando Buhari tenga ochenta años.

El All Progressives Congress (APC) se formó el 6 de febrero de 2013, a partir de una alianza entre tres partidos el Congreso de Acción de Nigeria, el Congreso para el Cambio Progresivo, el Partido de los Pueblos de Toda Nigeria y una facción de la Gran Alianza de Todos los Progresistas, que se unieron para competir con el entonces oficialista Partido Democrático Popular. El 13 de diciembre de 2014, el APC fue admitido como miembro consultivo en la Internacional Socialista.

En general se considera que el APC es un partido político de centroizquierda que favorece las políticas económicas de regulación o intervención estatal en el mercado. Un número sustancial de sus líderes políticos adhieren a la filosofía socialdemócrata de Obafemi Awolowo y a los puntos de vista socialistas y anticapitalistas de Aminu Kano.

El mayor apoyo electoral del APC se encuentra en el suroeste y el norte de Nigeria, que están dominados por los grupos étnicos más numerosos del país, los yoruba y los hausa-fulani.

El opositor con mayores posibilidades, el abogado y exvicepresidente Atiku Abubaker, es el candidato del más importante partido político de Nigeria, el Partido Democrático Popular, que se impuso en todas las elecciones presidenciales entre 1999 y 2011 y que actualmente controla 14 de los 36 estados del país.

El Partido Democrático Popular propone la aplicación de políticas neoliberales de libre mercado en economía y posiciones conservadoras sobre ciertos temas sociales, como la oposición a las relaciones entre personas del mismo sexo por razones morales y religiosas.
Atiku Abubaker, nació el 25 de noviembre de 1946, es el único hijo de un comerciante y agricultor fulani, Garba Abubakar y su segunda esposa, Aisha Kande, en la aldea de Jada en el estado de Adamawa. Se recibió de abogado en la Universidad Ahmadu Bello en 1969, e inmediatamente fue contratado por el Servicio de Aduanas de Nigeria, donde permaneció como funcionario por veinte años, alcanzando la posición de Director Adjunto.

Es musulmán y polígamo, tiene cuatro esposas, 28 hijos y más de un centenar de nietos.

Es un empresario acaudalado Se inició comercialmente, en 1974, comprando una casa con un préstamo bancario para construir una casa en Yola, que puso en alquiler. El crecimiento económico más importante de Abubakar se produjo cuando era un oficial de aduanas en los puertos de Apapa. Gabrielle Volpi, un empresario italiano que operaba en Nigeria, le propuso establecer una empresa que denominó “Nigeria Container Services” (NICOTES), una firma de logística que comenzó a operar dentro de los puertos.

NICOTES continuó brindando inmensas ganancias a Abubakar. Desde entonces, las acusaciones sobre “conflicto de intereses” lo han perseguido a raíz de su participación en negocios en el mismo ámbito en que se desempeñaba como funcionario público y en asuntos que estaban bajo su directa supervisión.

En respuesta, Abubakar adujo que su participación en dicha empresa se limitó a la propiedad de las acciones (lo que permite la legislación nigeriana), y que no estuvo involucrado en el funcionamiento diario de la empresa. NICOTES más tarde cambió de nombre por INTELS y mantiene negocios en la industria petrolera de Nigeria y de otros países africanos.

En 2005, Abubaker fundó la Universidad Americana de Nigeria, en Yola, estado de Adamawa. Se trata de la primera universidad de estilo estadounidense del África Subsahariana.

Actualmente el imperio comercial de Abubakar incluye una planta de fabricación de agua mineral y bebidas a base de jugos de frutas, Adama Beverages Limited, en Yola, así como una fábrica de alimentos para animales elaborados por extrusión.

En 1998, Abubaker lanzó una oferta para la gobernación del estado de Adamawa en la plataforma del Partido Demócrata Popular. Ganó las elecciones de diciembre de 1998, pero antes de asumir el cargo, fue elegido por el candidato presidencial de su partido, el ex jefe de Estado Olusegun Obansanjo, como su candidato a la vicepresidencia. La fórmula Obansajo – Abubaker se impuso en los comicios presidenciales del 27 de febrero de 1999, con el 62,78% de los votos.

Abubaker asumió el cargo de Vicepresidente de Nigeria 29 de mayo de 1999. Al mismo tiempo, presidió el Consejo Nacional de Privatización, supervisando la venta de cientos de empresas públicas deficitarias y mal administradas.

Ese año, junto con el vicepresidente sudafricano Jacob Zuma, lanzó la Comisión Binacional Sudáfrica – Nigeria.

En 2006, Abubaker entró en conflicto con el presidente Olusegun Obasanjo, aparentemente como resultado de la intensión de este último de aspirar a un anticonstitucional tercer mandato.

Se presentó como candidato presidencial por el partido Congreso de Acción en las elecciones del 21 de abril de 2007, saliendo tercero con el 7% de los votos.

Abubaker tiene prohibido el ingreso a territorio de los Estados Unidos, desde 2017, por un escándalo de soborno internacional junto a Willian Jefferson y una de sus esposas, Jenifer Atiku Abubaker.

Conscientes de que buena parte de la elección se decidirá en el sur cristiano del país, los dos candidatos han escogido con cuidado a sus vicepresidentes para tratar de obtener el apoyo de la población de esa región.

El presidente Buhari cuenta con su actual vicepresidente, Yemi Osinbajo, un pastor evangelista de Lagos procedente de la poderosa etnia yoruba, que ha sabido construir una imagen de hombre íntegro especialmente durante los largos periodos de ausencia por enfermedad del presidente.

Por su parte, Atiku Abubaker se apoya en la figura de Peter Obi, un empresario católico exgobernador de la región de Anambra, situada en el sureste del país, y de la etnia igbo. Obi es considerado un tecnócrata experto en economía.

Después de esa luctuosa jornada comicial, la Comisión Electoral Nacional Independiente -CENI- ha declarado que los resultados de la votación recién se conocerán una semana más tarde debido a la distancia y la gran diversidad de candidatos. Mientras tanto, todo el mundo contiene la respiración ante una posible crisis de gobernabilidad en el gigante africano que incremente dramáticamente los niveles de violencia en el país.


miércoles, 20 de febrero de 2019

HAITÍ SE SUMA A LA CRISIS CARIBEÑA



Haití, el país más pobre entre los 35 que integran el continente americano, se ha precipitado en una grave crisis institucional que amenaza la continuidad del presidente Jovenel Moïse.

El año 2019 se presenta complicado para la estabilidad y el crecimiento de la región del Caribe. Ahora a la crisis humanitaria y política en Venezuela y a las protestas violentas contra el gobierno del comandante sandinista Daniel Ortega se ha sumado ahora Haití

El pasado 7 de febrero, cuando se cumplía el segundo aniversario de su cargo por el presidente Jovenel Moïse, un empresario bananero de 51 años,  la población de Haití ha salido a las calles para exigir la renuncia del primer mandatario.

Haití es uno de los países más singulares del continente americano. Es el más pobre de todos ellos con un PBI de sólo 19.357 millones de dólares y uno de los más desfavorecidos del mundo, ocupa la posición 145 de 177 según el Índice de Desarrollo Humano de la ONU.
Es el único país americano cuyo idioma oficial es el francés. Además, por ser su población principalmente descendiente de esclavos africanos subsaharianos, se lo considera más bien un país afroamericano o afrocaribeño.

Esta ubicado en la zona central de las Antillas, en el tercio occidental de la Isla La Española que comparte con la República Dominicana.

Densamente poblado, con más de 270 personas por kilómetro cuadrado, su población de casi diez millones de habitantes agrega una diáspora de aproximadamente dos millones de haitianos distribuidos por el mundo (1.100.000 en la República Dominicana, 600.000 en los Estados Unidos, 100.000 en Canadá y otros 100.000 en las Islas Bahamas).

Se estima que el 80% de los haitianos con altos niveles educativos han emigrado, sumando la “fuga de cerebros” a los males del país.

El promedio de hijos por mujer es de 2,69 y la tasa de crecimiento de la población es de 1,7% anual.

La mayoría de esta población vive en la pobreza más absoluta dependiendo de la ayuda humanitaria internacional. El 80% de los haitianos subsiste con menos de un dólar al día.

Además de un origen étnico común, Haití comparte con algunos países africanos los mismos problemas estructurales. No la maldición de los recursos naturales porque no los posee, pero sí el subdesarrollo y la falta de inversiones extranjeras.

Aproximadamente el 70% de los haitianos depende de la agricultura que consiste principalmente en agricultura de subsistencia con cultivos a pequeña escala y emplea cerca de dos terceras partes de la población económicamente activa. La economía haitiana casi no genera nuevos puestos de trabajo por lo que la emigración es la única alternativa que se presenta a los jóvenes.

Tres cuartas partes del territorio haitiano están constituidas por suelos montañosos, y las llanuras están formadas por tierras deforestadas y actualmente estériles. La causa principal de la degradación del suelo ha sido la explotación forestal intensiva por una población que cada vez incrementa su demanda de leña y madera, lo que ha provocado la desertificación y la escasez de agua potable. Haití ha perdido el 98% de sus bosques. Esta situación contrasta con la de la vecina República Dominicana, que con un clima similar y condiciones iniciales similares práctico una política forestal adecuada y actualmente posee una cubierta vegetal sostenible.

A los males de la economía se agrega la inestabilidad política y los desastres naturales.
La historia de este país afrocaribeño es un continuo de inestabilidad y violencia producto de guerras civiles, golpes de Estado, dictaduras sangrientas, revueltas callejeras y frecuentes intervenciones militares extranjeras.

Desde que el 14 d agosto de 1791 se inició la Revolución Haitiana, que culminó con la independencia en 1804, el país ha vivido en la violencia, mucha violencia, que convierte a la actual crisis política e institucional, tan sólo en una etapa más.

Pero, como las calamidades nunca vienen solas. El 12 de enero de 2010 un devastador terremoto de magnitud siete en la escala de Richter golpeó al país provocando la muerte de 300.000 personas y gran destrucción en la escasa infraestructura existente.

Puerto Príncipe, la capital, quedó particularmente afectada. El Palacio Presidencial quedó muy afectado, colapsando el segundo piso sobre el primero. El edificio del Parlamento, la sede de la ONU y la Catedral de Puerto Príncipe también sufrieron fuertes daños. Esto generó que la mayor parte de actividad se traslade a Pétion-Ville, a unos ocho kilómetros, donde se hallan casi todas las embajadas, bancos, hoteles y restaurantes.

Los haitianos, con gran ayuda internacional, intentaban recuperarse de este desastre cuando, en 2016, otra catástrofe natural, el huracán Mattew, azotó al país dejando a su paso más de mil muertos y nueva destrucción.

Las actuales protestas, que han generado un clima de caos e incertidumbre, son producto de una combinación de factores. Principalmente, la crisis económica que se ha visto agravada en el último año por la depreciación del 20% del gourde, la moneda oficial. La alta inflación del 14,50% ha afectado el poder adquisitivo de la población. Los productos básicos en la dieta de los haitianos, como el arroz han duplicado su valor. Una bolsa de arroz cuesta 18 dólares, una lata de frijoles siete y los cinco litros de aceite pasaron de 7 a 11 dólares.

Pero lo que ha exaltado los ánimos de la población es el elevado nivel de corrupción. En especial las supuestas irregularidades en el programa “Petrocaribe” -a través del cual Venezuela suministra petróleo a varios países caribeños a precios ventajosos a cambio de apoyo político y diplomático. El programa fue creado por Hugo Chávez en 2005 y  Haití se incorporó al mismo en 2008-.

Una reciente auditoria presentada por el Tribunal de Cuentas reveló irregularidades entre 2008 y 2016, donde se habrían malversado unos 4.000 millones de dólares y que involucran al menos a quince altos funcionarios gubernamentales y a un grupo de empresas, entre ellas una que dirigía el presidente Moïse, en 2017, antes de asumir la presidencia.

La difusión de la auditoria detonó las protestas motorizadas por jóvenes desocupados de los barrios populares, con barricadas y saqueos a comercios y oficinas, que sacuden al país intermitentemente desde entonces y han provocado la muerte de siete manifestantes y un policía.

El gobierno de Moïse trata de controlar la situación convocando al diálogo. Pero los partidos de la oposición y organizaciones sociales, reunidos en el “Sector Democrático Popular”, presionan desde hace meses para obtener la renuncia del Presidente sin ofrecer un programa económico alternativo ni garantías reales frente a la corrupción.

Protestas similares se desarrollaron en julio -generada por un incremento del 50% en el precio del combustible-, septiembre y noviembre de 2018, pero las actuales son de mayor intensidad.

En este marco, el lunes fueron detenidos ocho contratistas militares -cinco estadounidenses, un haitiano, un ruso y un serbio- de la empresa de servicios militares Kroeker Partners Group que ingresaron al país con fuerte armamento y equipo táctico.

La oposición ha denunciado que los mercenarios fueron contratados para garantizar la seguridad del presidente, pero el gobierno lo niega y afirma que los someterá a proceso judicial.

La inestabilidad del país ha llevado a los Estados Unidos, Canadá y Brasil a evacuar a su personal diplomático.    

En este conflictivo marco, la oposición ha convocado una nueva movilización popular para exigir la renuncia del presidente Moïse y se negó a participar de cualquier intento de diálogo con el gobierno. Por lo cual la situación en Haití es de un final abierto.

lunes, 18 de febrero de 2019

ESTADOS UNIDOS RATIFICA LA SOBERANÍA DE MARRUECOS EN EL SÁHARA



El Congreso de los Estados Unidos se suma al Parlamento Europeo aprobando resoluciones que constituyen un directo reconocimiento de la soberanía de Marruecos en el Sáhara y a su condición de único representante de la población que habita en él.

El creciente protagonismo internacional de Marruecos, conducido por la hábil diplomacia personal del rey Mohammed VI, está reduciendo cada vez más el margen de maniobra del gobierno argelino y de sus compinches del Frente Polisario.

El año 2019 se ha iniciado muy favorable para la diplomacia marroquí. Primero fue la aprobación por parte del Parlamento Europeo de acuerdos agrícolas y pesqueros que constituyen un claro reconocimiento por parte de la Unión Europea de la soberanía de Marruecos sobre sus provincias del Sur.

Inmediatamente, la decisión del Parlamento Europeo fue acompañada de una visita de Estado del rey de España, don Felipe VI y su esposa doña Letizia que, además de ratificar la buena sintonía entre las casas reales a uno y otro lado del estrecho de Gibraltar, permitió la firma de once importantes convenios que incrementaron la asociación estratégica multidimensional entre ambos reinos.

Ahora, el reconocimiento de la soberanía marroquí en el Sáhara llega desde el otro lado del Atlántico.

El Congreso de los Estados Unidos acaba de aprobar su Ley de Presupuesto que estipula explícitamente que “Los fondos asignados (a Marruecos) en el Título III son igualmente utilizables para la asistencia en el Sáhara.”

Esta disposición en la Ley de Presupuestos, aprobada por el Congreso y promulgada por el presidente Donald Trump expresa claramente que para los Estados Unidos el único representante de los habitantes del Sáhara es el Reino de Marruecos, legítimo titular de la soberanía en esa región.

Estos acontecimiento no son hechos aislados sino que muestran la clara decisión de las principales potencias internacionales de terminar con más de cuarenta años de la simulación montada por un grupo de terroristas que se autoproclamaron únicos representantes de un supuesto “pueblo” y que pretenden convencer al mundo de que un grupo de precarios campamentos instalados en la hamada argelina son un supuesto “Estado” y que un grupo de aprovechados bandidos son sus “embajadores”.

Esto queda claro cuando treinta y cinco países africanos que en algún momento, cediendo a las presiones de Argel, reconocieron a la inexistente “República Árabe Saharaui Democrática”, han retirado actualmente ese reconocimiento.

Mientras que Marruecos gana protagonismo día a día en el mundo. Atrae continuamente grandes inversiones productivas de países europeos y de los Estados Unidos, se convierte en sede de cumbres internacionales y de eventos de notable envergadura, regresa a la Unión Africana y el rey Mohammed VI es nombrado “Líder de la Unión Africana para las Migraciones”, etc.

El Frente Polisario, por el contrario está cada vez más aislado en el escenario internacional y es cada día más dependiente del apoyo de un puñado de estados parias, como los son: Argelia, Cuba, Venezuela, Irán, Nicaragua y Siria.

jueves, 14 de febrero de 2019

LOS REYES MOHAMMED VI Y FELIPE VI PROFUNDIZAN LA ASOCIACIÓN ESTRATÉGICA ENTRE MARRUECOS Y ESPAÑA



La visita de los reyes de España, don Felipe Vi y doña Letizia ha Marruecos, el miércoles 13 de febrero creó la oportunidad ideal para que ambos reinos incrementaran su asociación bilateral con la firma de once acuerdos de cooperación.

Marruecos y España comparten una milenaria relación forjada por la geografía, la historia y la cultura de tal forma que la historia de uno de estos reinos no puede ser cabalmente comprendida sin tomar en consideración la existencia del otro.

Hoy Marruecos y España son socios estratégicos que tienen intereses en común en diversos campos. Los datos estadísticos de la economía marcan la verdadera dimensión de esta asociación estratégica que es objetivamente concreta y no meramente retórica.

España es le mayor inversor en el reino magrebí. En tanto que Marruecos es un actor clave en temas de migraciones y seguridad que afectan directamente a España y a la Unión Europea.

El Acuerdo Pesquero entre Marruecos y la Unión Europea, aprobado esta semana por el Parlamento Europeo, favorece especialmente a 90 barcos pesqueros españoles que podrán, durante los próximos cinco años, faenar en las aguas de la zona económica exclusiva de Marruecos, en la región del Sáhara, ricas en recursos ictícolas.

Los intereses comerciales marroquíes – españoles se incrementaron significativamente entre 2010 y 2017, creciendo un 11,5%. En 2018, la balanza comercial bilateral alcanzó los 14.000 millones de euros y aunque aún es favorable para España tiende año a año a ser cada vez más equilibrada.

España es el primer cliente de Marruecos y absorbe el 23,7% de las exportaciones marroquíes. Mientras que Marruecos adquiere en la Península el 16,8% de sus importaciones, lo que convierte a España en el principal proveedor de Rabat.

Para España, Marruecos es el 11° proveedor y el 9° cliente global, pero es el segundo mercado fuera de la Unión Europea, después de Estados Unidos, y el primer destino de inversión española en África, con un stock acumulado de más de 4.500 millones de euros.

Entre las más de mil empresas españolas asentadas en Marruecos, que dan empleo a 18.000 marroquíes, muchas de ellas trabajan para la fábrica Renault en TángerMed y otras abastecen a grandes cadenas de la moda, como Sara, El Corte Inglés o Inditex.

Las relaciones bilaterales no se limitan al terreno económico. En España residen un millón de marroquíes que envían a su país quinientos millones de euros anuales en remesas. Los turistas que visitan cada año Marruecos procedentes de España suman dos millones (la mitad de ellos son de origen marroquí), mientras que los turistas marroquíes en España alcanzan ya los 900.000 por año. En Marruecos está la segunda red mundial del Instituto Cervantes (con seis centros y seis sucursales) y cinco mil alumnos estudian en colegios españoles.

La buena relación entre ambos reinos se ha cimentado en acciones en común y en la buena sintonía personal entre ambos monarcas. Tal como lo destacó la embajadora de Marruecos en Madrid, Karina Benyaich: “Su Majestad el Rey Mohammed VI y Su Majestad el Rey Felipe VI comparten una visión estratégica y la misma determinación de erigir la relación entre ambos países vecinos en un ejemplo de una asociación norte – sur sólida e innovadora a favor del bienestar de ambos países, contribuyendo así a la paz, a la estabilidad y a la prosperidad en la cuenca mediterránea y en la costa atlántica”.

El papel de los monarcas cobra mayor importancia cuando la integridad territorial de la Nación es cuestionada por los delirios de los separatistas o la gobernabilidad del Estado es amenazada por la intensificación de las pujas ideológicas y políticas de los partidos.

La presente visita de 36 horas, realizada esta semana por don Felipe VI y doña Letizia a Rabat, donde fueron recibidos por el rey Mohammed VI, el príncipe heredero Moulay El Hassan y el resto de la familia real marroquí, es la segunda que la pareja real española realiza al país magrebí.

La delegación española que acompañó a la pareja real incluyó a cinco ministros y a un secretario de Estado del gobierno socialista de Pedro Sánchez. Fueron los titulares de Exteriores, Josep Borrell; de Interior, Fernando Grande-Marlaska; Cultura, José Guirao; Agricultura, Luis Planas e Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, junto al secretario de Estado de Energía, José Domínguez Abascal.

La visita ha servido tanto para cimentar la relación entre ambas casas reales como para la firma de once convenios bilaterales de cooperación que incrementarán aún más la asociación estratégica entre ambos reinos.

Los acuerdos suscriptos comprenden una diversidad de temas que hacen a la asociación estratégica multidimensional entre ambos reinos. Entre ellos se destacan los energéticos, migraciones, transporte aéreo, interconexión eléctrica, seguridad y lucha contra el crimen organizado, culturales, flujos comerciales y de pasajeros, mercados de capitales, etc.

Esta segunda visita del Rey de España, en los últimos cinco años, indica la importancia que La Moncloa otorga a su relación con Marruecos como socio y como base de operaciones para proyectar sus intereses geopolíticos en el continente africanos.

Es por lo que, España está siempre atenta al creciente protagonismo de Mohammed VI en la política africana y en el mundo árabe, además del papel moderador que el rey alauí cumple en la umma al-islam, como Comendador de los Creyentes, al proponer una interpretación del islam más tolerante y solidaria.

Mohammed VI, es cada día más, visto por Occidente como el estadista más importante para la mantener la estabilidad y el progreso sostenible en el Magreb y en toda África.

miércoles, 13 de febrero de 2019

PARLAMENTO EUROPEO RECONOCE SOBERANÍA MARROQUÍ SOBRE EL SÁHARA



La aprobación por parte del Parlamento Europeo del acuerdo pesquero con Marruecos es un nuevo reconocimiento explícito a la soberanía del Reino sobre sus provincias del Sur y del pleno derecho a administrar sus recursos naturales.

El Parlamento Europeo a dejado de ceder a la extorsión de Argelia y de sus socios del Frente Polisario y ha asumido plenamente que el Sáhara es una parte constitutiva de hecho y de derecho del Reino de Marruecos.

Así se desprende claramente de la reciente votación por la cual el legislativo comunitario aprobó por una clara mayoría de 415 votos a favor, 189 en contra y 49 abstenciones el Acuerdo Pesquero entre Marruecos y la Unión Europea, que implica el reconocimiento de la plena soberanía marroquí y el derecho a administrar sus recursos naturales en la región del Sáhara desde el paralelo 35 en el Norte, hasta el paralelo 20 en el Sur, desde Cap. Spartel hasta Cap. Blanc, al sur de la bella ciudad – puerto de Dakhla.

El Acuerdo Pesquero, que reemplaza el anterior protocolo caducado el 14 de julio pasado, es ampliamente favorable para ambas partes. A partir de su implementación, un total de 128 barcos comunitarios podrán faenar durante los próximos cuatro años en las aguas de la zona económica exclusiva de Marruecos.

El Reino magrebí recibirá en contrapartida una pago anual de 52 millones de euros, en lugar de los 40 millones del acuerdo anterior, también deberán incorporar un mayor número de marinos marroquíes entre el personal a bordo de la flota pesquera europea.

También se mantendrá la cláusula de obligación de descargar en puertos marroquíes las capturas, estableciendo una penalización del 15% (en lugar del 5% del anterior acuerdo) para las empresas pesqueras en caso de que violen esta obligación.

La decisión adoptada por el Parlamento Europeo responde claramente a los intereses geopolíticos y no sólo económicos de la Comunidad Europea.

La Europa comunitaria es permanentemente coaccionada por su dependencia del abastecimiento de petróleo y gas proveniente de Argelia. Pero la debilidad del régimen de Argel, con un presidente virtual y una sórdida lucha por el poder librándose tras bambalinas los legisladores europeos han optado por un acto de justicia y realismo político.

Los delirios separatistas del Frente Polisario y su permanente apelación a la solidaridad ideológica no fueron suficientes para mantener la ficción de que ellos representan a la población del Sáhara. El Parlamento Europeo reconoció explícitamente que el único representante de la población del Sáhara es el Reino de Marruecos.

Este reconocimiento es producto de los permanente esfuerzos diplomáticos del rey Mohammed VI y de su creciente liderazgo en los asuntos africanos.

Además, del realismo europeo que reconoce que necesita de Marruecos para controlar los flujos migratorios en el Norte de África, para contener la actividad de los grupos yihadistas en el Mediterráneo y, especialmente, para apoyar la difusión de una interpretación tolerante del Islam como la que patrocina Mohammed VI como Comendador de los Creyentes.

El Acuerdo Pesquero entre Marruecos y la Comunidad Europea es una nueva victoria para el reino magrebí y una nueva prueba de la decadencia de Argelia y el Frente Polisario.



domingo, 10 de febrero de 2019

MULTITUDINARIA MANIFESTACIÓN OPOSITORA EN MADRID



Bajo la consigna de “Por una España unida. ¡Elecciones ya!”, 70.000 españoles se congregaron en la Plaza Colón de Madrid respondiendo a la convocatoria de los partidos de centro derecha Partido Popular, Ciudadanos y VOX para poner fin al gobierno del socialista Pedro Sánchez.
El presidente de Gobierno Pedro Sánchez enfrentó el domingo 10 de febrero la primera marcha masiva de la oposición en sus ocho meses de gobierno. La convocatoria estuvo a cargo de Pablo Casado del Partido Popular, Albert Rivera de Ciudadanos y Santiago Abascal de VOX aunque adhirieron otros partidos y organizaciones sociales como: Unión del Pueblo Navarro, el Partido Aragonés, Unión Progreso y Democracia, Foro Asturias,  la Falange Española, España 2000, Hogar Social Madrid.

La manifestación fue convocada para defender la unidad de España, pedir elecciones inmediatas y protestar contra la llamada “política de diálogo” de Pedro Sánchez con la Generalitat de Cataluña, después de una semana de gran agitación política por la negociación del Ejecutivo con el Govern y la adopción de la polémica figura de un mediador internacional en la mesa de partidos catalanes, todo ello en el contexto del debate parlamentario de la Ley de Presupuestos y el comienzo del juicio a los líderes del Procés.
El Sindicato Unificado de Policía, representado por su secretaria general Mónica García, también adhirió “en defensa del trabajo policial en Cataluña”.

Los asistentes portaban banderas rojigualdas, sin signos partidarios, y amenizaron el acto con el “Viva España” de Manolo Escobar. Los partidos convocantes pusieron un centenar de autobuses, además de automóviles particulares, para trasladar a los asistentes y movilizaron contingentes de otras regiones.

Por parte del Partido Popular, junto a Pablo Casado estuvieron todos los líderes territoriales del partido, entre ellos el presidente de Andalucía Juan Manuel Moreno, el de Galicia, Alberto Núñez Feijoo el secretario general Teodoro García Egea y Isabel Díaz Ayuso y José Luis Martínez Almeida candidatos a la alcaldía y la Comunidad de Madrid.

De Ciudadanos estuvieron presentes Albert Rivera y la líder del partido en Cataluña, Inés Arrimadas, Manuel Valls, ex primer ministro francés y exdirigente de los socialistas franceses antes de encabezar la candidatura a la alcaldía de Barcelona en la que participa Ciudadanos. También estuvieron presentes Toni Cantó, Marta Rivera de la Cruz, Begoña Villacís y el premio nobel de literatura, el peruano nacionalizado español, Mario Vargas Llosa.

De VOX, además del líder Santiago Abascal, asistieron Javier Ortega-Smith, secretario general de formación e Iván Espinosa, vicesecretario de relaciones internacionales y Rocío Monasterio.

Los periodistas María Claver, Albert Castillón y Carlos Cuesta fueron los encargados de leer una declaración oficial de la convocatoria que en sus párrafos esenciales dice los siguiente:
“Hoy, quienes defendemos sin complejos la unidad de España y mostramos nuestro hartazgo por las cesiones y bandazos permanentes del Presidente del Gobierno ante los secesionistas catalanes, hemos sido convocados a esta magnífica Plaza de Colón de Madrid”, comenzaba la declaración.

“Los partidos políticos y las organizaciones de la Sociedad Civil reunidos en esta concentración queremos manifestar nuestro más enérgico rechazo a la traición perpetrada por el Gobierno de España en Cataluña”

“Los acontecimientos de los últimos días suponen una humillación del Estado sin precedentes en nuestra vida democrática. Tras meses de constantes cesiones intolerables y a pocas horas de que el Tribunal Supremo comience a juzgar a los responsables de la ruptura del orden constitucional que se produjo en octubre de 2017, el gobierno de Pedro Sánchez decidió dar una puñalada por la espalda a la ley y a la justicia aceptando los términos y exigencias impuestos por el Presidente de la Generalitat.”

“El Gobierno ha cedido al chantaje de aquellos que quieren destruir la convivencia ciudadana en nuestro país y ha renunciado a defender la dignidad de los españoles, con el único objetivo de mantenerse en el poder.”

“Cedió al recibir con lazos amarillos al presidente de la Generalitat en Moncloa.”

“Cedió al trasladar a los políticos presos a la cárcel de Llodoners. Cedió al aceptar la bilateralidad entre iguales en la reunión de Pedralbes. Cedió al torcer el criterio jurídico de la Abogacía del Estado. Cedió al aceptar las 21 exigencias del secesionismo. Cedió al iniciar unas negociaciones para aprobar los Presupuestos Generales del Estado, ofreciendo a cambio la soberanía nacional. Cedió al admitir la posibilidad de que hubiera mediadores, relatores, o cualquier otra figura semejante. Cedió en todas las ocasiones en las que debería haber defendido la dignidad de los españoles ante quienes quieren acabar con nuestra democracia y nuestro orden constitucional.” […]

“Nosotros, los reunidos en esta Plaza, compartimos, y por compartirlo representamos, el hartazgo de la inmensa mayoría de los españoles ante la deriva suicida del Gobierno de Pedro Sánchez y afirmamos, una vez más y todas las veces que haga falta, nuestro compromiso con la unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles; patria de todos, en la que a nadie se discrimina por cómo piense o a quién vote.”

“Rechazamos que se ponga en peligro la integridad territorial. Nuestra nación se construyó sobre el acuerdo de muchos para lograr entre todos un proyecto común, un proyecto nacional. Un proyecto que, respondiendo a una realidad histórica de siglos, ha dado lugar al país en el que vivimos y la nación a la que amamos y por la que hoy estamos aquí.” […]

“Hoy estamos aquí reunidos para decirle al Gobierno de España que no estamos dispuestos a tolerar más traiciones ni concesiones frente a aquellos que quieren destruir nuestra patria. Estamos aquí para decir alto y claro que la unidad nacional no se negocia.”

“Por todo ello, exigimos al presidente del Gobierno la convocatoria inmediata de elecciones generales para que todos los españoles puedan decidir su futuro. ¡Viva la Constitución.”
La convocatoria finalizó sin incidentes y los manifestantes se desconcentraron en orden luego de entonar el Himno de España.

Los líderes de los partidos de centro derecha esperan forzar a Sánchez a llamar a elecciones generales para el super domingo del 26 de mayo donde deberán realizarse elecciones municipales, autonómicas y europeas. Pero el líder del PSOE se resiste y pretende agotar la actual legislatura y demorar los comicios generales hasta el 2020.

Los partidos de izquierda planean realizar una contramanifestación el próximo 8 de marzo, aprovechando la conmemoración del “Día Internacional de la Mujer”. Lo que habla de la forma en que la izquierda está instrumentando y se ha apropiado del justo derecho a la igualdad de género con fines de proselitismo de un solo sector ideológico. Así el “derecho a la igualdad de género” se ha transformado en la “ideología de género”.

sábado, 9 de febrero de 2019

LA DERECHA ESPAÑOLA PONE EN JAQUE AL GOBIERNO DE PEDRO SÁNCHEZ



Los partidos de centro derecha en España: Partido Popular, Ciudadanos y VOX convocan  a poner fin al gobierno minoritario del PSOE y preservar la unidad del Reino.

Muchos analistas políticos insisten en afirmar que el siglo XX fue el tiempo de las ideologías y que estas han muerto en el siglo XXI donde impera el pragmatismo político. Esto puede ser cierto en muchos países pero no en España.

En pocos meses más se cumplirán 80 años del fin de la Guerra Civil que ensangrentó a la Península pero las pasiones ideológicas que desataron la tragedia no parecen haber desaparecido totalmente.

El PSOE gobierna en España desde el 12 de junio de 2018 gracias a una discutida moción de censura que desplazó a Mariano Rajoy, del Partido Popular. Sánchez gobierno con el apoyo de lo que constituye una verdadera coalición de izquierda formada, además del PSOE, por Unidos Podemos, Ezquerra Republicana de Cataluña, Partido Nacionalista Vasco, Partido Demócrata Europeo Catalán, Compromís, Bildu y Nueva Canaria. Es decir, una extraña asociación de formaciones políticas populistas de izquierda, anticapitalistas, separatistas y antimonárquicos.

Una coalición en que cada integrante tiene una agenda distinta y que solo se mantiene unida por la ambición de Pedro Sánchez y un sector de la dirigencia del PSOE de mantenerse a toda costa en La Moncloa.

Con sólo 84 escaños sobre 350 en la Cámara de Diputados, Sánchez debe hacer continuamente concesiones a sus aliados para sobrevivir hasta el final de la presente legislatura en 2020.

Para ello será preciso que logre que el Parlamento le apruebe la Ley de Presupuestos Generales del Estado y atravesar con relativo éxito las elecciones municipales y autonómicas del super domingo 26 de mayo.

Los separatistas catalanes tienen una agenda basada en la liberación de los presos del procés y implementación de negociaciones que conduzcan a la realización de un referéndum sobre la independencia y separación de Cataluña del resto de España.
En otras palabras el nacionalismo catalán sigue sin aceptar que un empate es lo máximo a lo que puede aspirar y plantea demandas inalcanzables.

El 20 de diciembre pasado Pedro Sánchez se reunió con el presidente catalán Quim Torra, en Pedralbes, en esa ocasión los separatistas presentaron un documento con veintiún peticiones al gobierno español.

Por un momento, el gobierno socialista mantuvo en secreto el contenido del documento, pero los separatistas catalanes presionaron con no aprobar la Ley de Presupuestos y dieron a conocer el documento conteniendo las peticiones.

Sánchez cedió a comienzos de la semana accediendo a tratar la cuestión catalana en una “mesa de negociación” del Estado español con todos los partidos políticos catalanes -incluso aquellos que carecen de representación parlamentaria- y con un “mediador internacional” que se elegirá de una lista elaborada por los catalanes.

Esta negociación, al margen del Parlamento español, y la presencia de un “mediador internacional” despertaron inmediatamente el rechazo de quienes temen por la integridad territorial del Reino de España, incluso dentro del propio Partido Socialista Obrero Español.
La protesta fue encabezada por separado pero en forma coordinada por los líderes del Partido Popular, Pablo Casado, del partido Ciudadanos, Alberto Rivera y del partido VOX, Santiago Abascal, que convocaron a una manifestación de protesta para el domingo 10 a las 11.00 horas, en la emblemática Plaza Colón de Madrid Bajo la consigna de “sumar fuerzas en las calles para echar a Sánchez”.

Es decir, para forzar a la coalición gobernante a adelantar las elecciones generales.

Los líderes de las formaciones de centro derecha han sido categóricos en condena a la decisión del presidente de Gobierno, Pedro Sánchez.

Pablo Casado, por ejemplo, ha dicho: “No se puede vender a España a cambio de un plato de lentejas por seguir en La Moncloa.”

Para VOX una “mediación internacional” supone “un reconocimiento de facto de la independencia de Cataluña”. “Y por lo tanto una traición de Pedro Sánchez a España y a la Constitución. A los golpistas separatistas solo hay que aplicarles el Código Penal. A Pedro Sánchez parece que también.”

Mientras que Albert Rivera, presidente de Ciudadanos, ha convocado a los españoles a manifestarse para “defender la Constitución más allá de las ideologías o siglas” y a crear un “frente cívico” que diga “basta ya” a Sánchez. “Hay que frenar a Sánchez en las calles”, enfatizó.

Pero el rechazo a la decisión de Sánchez se ha extendido también a las propias filas del socialismo.

La diputada socialista por Valladolid Soraya Rodríguez pidió que en “el diálogo entre el Estado” y Cataluña se respete la Constitución, el Estatuto de Autonomía y a las propias instituciones”. “Ni mediadores ni relatores”, ha señalado.

Soraya Rodríguez no es la única socialista que se ha mostrado escéptica ante el movimiento del Ejecutivo. El presidente de Aragón y Secretario General del PSOE en la región, Javier Lambán, ha recordado que “aprobar un presupuesto no justifica cesiones que pongan en cuestión la Constitución, la unidad de España, el estado de derecho y la decencia.”

También el expresidente de Gobierno, Felipe González, cuestionó la decisión del líder socialista. “No necesitamos relatores” dijo tajante. “Esa es una figura de Naciones Unidas”, recuerda González para dejar claro que en un asunto interno de un país no cabe incrustar ese elemento. Pero sus discrepancias de fondo y forma son más profundas, ya que no está de acuerdo con la propia existencia de esa mesa de partidos, toda vez que esa función de diálogo, con el que está de acuerdo, corresponde al propio Parlamento catalán, “donde hay muchos asesores y muchas personas que pueden hacer de notarios”, agregó.

En síntesis, dos coaliciones, una de centro derecha y la otra de centro izquierda se están disputando el poder en España con el conflicto en Cataluña y la unidad del Reino como telón de fondo. Habrá que esperar para ver cual es el poder de convocatoria de los opositores a Pedro Sánchez y la capacidad de maniobra del presidente de Gobierno para lograr que sus aliados aprueben la Ley de Presupuestos para saber si España votará en mayo un nuevo gobierno.