El gobierno de Marruecos anunció la última semana que
ha decidido reforzar su “cooperación
militar y de seguridad multiforme y de larga duración” con los Emiratos
Árabes Unidos que integran el Consejo de Cooperación para los Estados Árabes
del Golfo.
Al anunciar la medida el Ministro del Interior,
Mohamed Hassad, precisó que: “La iniciativa marroquí es una expresión primero
de nuestra convicción para hacer frente a todas las formas de terrorismo y a
todas las amenazas que puedan comprometer la estabilidad y la seguridad de la
región”.
Los Estados del Golfo se encuentran especialmente
preocupados por los anuncios del grupo terrorista autodenominado “Estado Islámico” quien ha declarado su
propósito de atacar a todos los países árabes que alberguen a contingentes
militares occidentales. Recordemos que esta organización incluso afirmó que: “Podemos acceder fácilmente a los países del
Consejo de Cooperación del Golfo. Podemos llegar a Kuwait. Estados Unidos vendrá
por nosotros allí y tendremos la oportunidad de luchar y vengarnos de los
americanos.”
Marruecos tiene una larga tradición de participación
activa en la seguridad de otros países árabes y africanos. En 1990 desplegó sus
tropas en Arabia Saudí tras la invasión de Kuwait para contribuir a la
seguridad de ese reino. También participó en operaciones destinadas a mantener
la integridad territorial y la seguridad en Congo, Zaire (actual RDC) y en los
Altos del Golán. Asimismo, varios centenares de efectivos marroquíes han sido
desplegados durante décadas en el territorio del Emirato de Abu Dhabi.
Estas medidas anunciadas por Rabat se complementan con
otras aplicadas en el marco interno para prevenir cualquier tipo de amenaza
contra la seguridad de los ciudadanos marroquíes. A tal efecto unidades
especiales de las Fuerzas Armadas realizaran patrullajes y controles especiales
en aeropuertos y otras instalaciones sensibles situadas en las ciudades de
Rabat, Casablanca, Tánger, Marrakech, Agadir y Fez.
Marruecos siempre se ha destacado por la colaboración
que brinda a otros Estados en la lucha activa contra el terrorismo internacional,
como lo evidencian las acciones periódicamente llevadas a cabo para el desmantelamiento
de células y la detención de elementos terroristas en distintos puntos de su
territorio.
Aplicando una política de “tolerancia cero” con el terrorismo, a lo largo de 2014, la
Dirección General de Vigilancia del Territorio ha desmantelado tres células de
captación y formación de terroristas, en el entorno de Nador, en el Norte de
Marruecos frente a España. En enero pasado se detuvo allí a más de veinte miembros
de un grupo yihadista dirigido por un ex militar español. En marzo se apresó a
los integrantes de una célula formada por siete terroristas y dirigida por el
español Mustafá Maya Amaya. En septiembre se detuvieron otros ocho terroristas marroquíes
vinculados a Al Qaeda del Magreb Islámico.
En esta forma Marruecos suma su esfuerzo y expresa en
forma contundente su apoyo a la seguridad y estabilidad internacional
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